A partir de los 35 años la piel del rostro pierde elasticidad y se disminuye el grosor de la capa grasa, aumentando y profundizando las arrugas.
A esta edad se recomienda 3 o 4 sesiones de peelings químicos para mejorar la calidad de la piel, el uso habitual de cremas antienvejecimiento y en algunos casos la aplicación de bótox-vistabel para retrasar la formación de arrugas.
A partir de los 40 años, el envejecimiento cutáneo ya es de caracter moderado y se pueden optar a diferentes técnicas para combatirlo, algunas más invasivas que otras.
Las dos soluciones más demandadas son el lifting y la bioplastia.
El Lifting es una intervención quirúrgica que consiste en reposicionar el tejido cutáneo que ha descendido con la edad. Actualmente sigue siendo el método más demandado para el rejuvenecimiento facial, pero se necesita un mes aproximadamente para ver los resultados. El precio oscila entre 5000 y 7000 euros.
La Bioplastia es un método no invasivo que consiste en implantar un material de relleno temporal o permanente en las diferentes zonas de la cara para rellenar, elevar o aumentar los volumenes. Los resultados son visibles a las 48 horas y el precio son 600 euros aproximadamente.
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